¿Y si acabaran hoy los Juegos Panamericanos?

Perú tendría el cierre perfecto de una accidentada organización de las lides continentales, luego de la extraordinaria ceremonia inaugural el viernes en el Estadio Nacional y el doble triunfo en las carrera de la maratón femenino y masculino.

Tercero en el medallero con tres medallas de oro, dos de plata y una bronce, los vibrantes nombres de Gladys Tejeda y Christian Pacheco en las pruebas de largo aliento, y de Diego Elías en squash dieron la vuelta a la nación incaica en día feriado.

En el hipotético y absolutamente improbable caso de que la cita regional concluyera hoy, sin dudas México estaría exultante, con su dominio en el cuadro de preseas por países sino doradas, tres plateadas y siete bronceadas (hechas de coba en realidad.

Dos especialistas en taekwondo, Paula Fregoso, reina de la modalidad de poomsae, y Daniela Souza en combate en la categoría de los 49 kilogramos sonrieron en lo más alto del podio.

Lo mismo que Crisanto Grajales en triatlón, Mariana Arceo en el pentatlón moderno y el pesista Jonathan Muñoz en la división de -67 kilogramos. De tal forma que los mexicanos, al menos por una noche, durmieron arriba de Estados Unidos (4-5-4).

Empero, como la felicidad nunca es completa, Brasil en cuarto lugar del medallero (2-3-3) no estaría nada contento como tampoco Cuba en sexto (2-0-2) ni Colombia (1-3-4). Conforme, posiblemente, Argentina, quinto con dos áureas, una plateada y dos bronceadas.

Ya sabemos, de todas formas, que en la historia de los Juegos Panamericanos Estados Unidos es el rey con cuatro mil 430 metales de los tres colores, seguido por Cuba con dos mil 26, Canadá mil 913 y Brasil mil 207, Argentina mil 60 y México mil 12.