NEW JERSEY.- Tim Brindley, un pescador de Nueva Jersey de 58 años, por casualidad obtuvo una captura inesperada: un enorme tiburón blanco que “olía a muerte” mientras derramaba sangre. En efecto, no estaba vivo.
Brindley, residente de Barnegat Light, dijo que el gran tiburón blanco se había enredado en su red de arrastremientras pescaba el 1 de agosto a unas 2 millas de Barnegat Inlet, cerca del naufragio de un buque tanque que se hundió en 1942, reportó Asbury Park Press.
“Solo pensé, ‘Dios mío, hay un gran tiburón blanco en la red’, dijo Brindley al periódico, y agregó que la captura fue la primera en su tipo para él, y mucho más interesante que otros hallazgos aleatorios previos como hélices de aviones y neumáticos de automóviles.
Brindley colocó en su cuenta Facebook fotos del escualo de 10 pies, más del doble de la estatura del pescador (5 pies y 10 pulgadas).
“Parecía estar muerto durante un par de días”, escribió Brindley junto con tres fotos, incluida una del tiburón ensangrentado con una cuerda alrededor de la mitad del cuerpo, en los bronquios.
“Este pez estaba muerto en el fondo y quedó atrapado en mi red”, escribió. “Se estaba [deteriorando] y olía a muerte. Por eso pude poner una cuerda alrededor de su sección media, nunca podrías hacer eso con uno vivo”.