El directivo y empresario mexicano se alzó de la quiebra para convertirse en billonario, fue querido y amado en el fútbol mexicano y su muerte sorpresiva deja un vacío difícil de llenar.
Jorge Vergara
Especial.-
A Jorge Vergara le gustaba hacer las cosas a su manera y esa vía le permitió no solo ser billonario y famoso, sino además polémico, discutido, amado y odiado.
El dueño del club Chivas de Guadalajara murió sorpresivamente el viernes 15 de noviembre en Nueva York, víctima de un ataque al corazón. Tenía 64 años.
Nacido en 1955 en Guadalajara, México, y profundamente nacionalista, Vergara justamente compró en el 2002 la franquicia futbolística más popular de su país, en un momento que este equipo estaba al borde de la quiebra y lo reflotó hasta devolverle su poderío y coronarlo como campeón.
Vergara tenía experiencia propia de recuperarse de una caída. Hijo de un ejecutivo mexicano, desempeñó una serie de oficios, luego de renunciar a sus estudios universitarios y fue mesero, oficinista, mecánico y luego inició su propio negocio de alimentos, pero fracasó.
«Estaba gordo, enfermo y quebrado», confesaría Vergara en el recuento de sus luchas. Tuvo la providencia de conocer al fundador de la empresa Herbalife de suplementos dietéticos, Mark Hughes, quien lo animó que vendiera sus productos en México.
Vergara tomó el reto, aprendió el negocio y poco después se dio cuenta que habían cosas que podía hacerlas mejor y a su manera y optó por separarse de Herbalife y con un préstamo de 10,000 dólares creó su propia compañía que bautizó como Omnilife.
El rápido éxito de su nueva empresa de suplementos nutritivos lo llevó a estimular su pasión por el fútbol y así compró a las Chivas, el único club mexicano que solo admite jugadores de dicha nacionalidad.
El ansiado título para el «Rebaño Sagrado» lo logró en el 2006, pero su carácter temperamental, perfeccionista e inconforme lo llevó a cambiar 28 entrenadores en 17 años.
Dejó en el club de sus amores importantes legados, sin embargo. El principal de ellos es un nuevo estadio y dos títulos de la Liga Mexicana, que ayudó a fundar. También conquistó dos copas mexicanas, una Supercopa, un título en la Liga Femenil y a nivel internacional logró la
Liga de Campeones de la Confederación del Norte, Centro América y del Caribe de Fútbol (CONCACAF).
Su ambición y deseo por expandirse lo llevó a comprar en el 2005 una franquicia en la Liga Estadounidense (MLS), Chivas USA; el club Saprissa de Costa Rica, de 2003 al 2011, e intentó comprar el club Universitario de Deportes de Perú pero los fanáticos del equipo de Lima se opusieron totalmente a que un hombre tan explosivo como Vergara se hiciera dueño de uno de las instituciones deportivas más populares del Perú.
Su visión particular de las cosas era tan radical que pretendió que todas las comunicaciones oficiales y los asuntos de negocios de Chivas USA fueran conducidos en español. Aquello determinó que fuera llevado a Corte y finalmente el asunto se resolvió cuando la MLS decidió comprarle el club en el 2014.
También Vergara incursionó en la producción cinematográfica y así se unió a Alfonso Cuarón, ganador del Oscar con Gravity y Roma y el primer latinoamericano en obtener el premio máximo de la Academia como Mejor Director. Con Cuarón produjo «Y tu mamá también». Además, produjo películas al lado de Guillermo del Toro y Pedro Almodóvar.
Ese afán de diversidad influyó para que Vergara delegara en su hijo Amaury la conducción de Omnilife y el club Chivas. También la salud le estaba jugando una mala pasada y por eso el viejo caudillo de mudó a Nueva York a seguir un tratamiento y fue ahí donde lo encontró la muerte.
«Con profunda tristeza y dolor en mi corazón, comunico el fallecimiento de mi padre debido a un ataque al corazón», escribió Amaury en un comunicado enviado al periódico -Los Angeles Times-. «Honramos a mi padre de la manera como nos enseñó con su ejemplo: trabajando todos los días, siendo sensible con los demás y alcanzando nuestros sueños».
Algunos de los jugadores más emblemáticos del balompié mexicano como Cuauhtémoc Blanco, Rafa Márquez y Omar Bravo expresaron su pesar por la muerte de Jorge Vergara y su agradecimiento por todo lo que aportó al fútbol, aunque mucho de ello fuera hecho bajo un volcán de pasiones.
Vía: Diario Las Americas
