“Mis expectativas están muy altas. Voy con una sola meta: buscar el oro que me quitaron en los Juegos Panamericanos de Toronto”, narra Ferreras a El Nuevo Diario, quien es doble medallista de oro Centroamericano y del Caribe.
Deivis Ferreras, karateca dominicano
Por William Aish
SANTO DOMINGO.- El laureado karateca dominicano Deivis Ferreras va a su terceros Juegos Panamericanos, esta vez en busca de su primer oro en este tipo de evento y con una misión: quitarse una espinita que tiene desde el 2015, cuando en Toronto según él por una mala decisión arbitrar no pudo ganar la presea dorada.
Con 30 años de edad y su último Juegos Panamericanos, a celebrarse en Lima, Perú, del 26 al 11 de agosto, Ferreras tiene grandes expectativas.
“Mis expectativas están muy altas. Voy con una sola meta: buscar el oro que me quitaron en los Juegos Panamericanos de Toronto”, narra Ferreras a El Nuevo Diario, quien es doble medallista de oro Centroamericano y del Caribe.
Ferreras declaró que en el 2011 en Veracruz, México, llegó hasta la semifinal, por lo que trabajó más fuerte para Toronto (2015), ahí perdió en la pelea final, donde se quedó con su primera plata.
Ferreras vio esfumarse la medalla de oro en los 65 kilos en karate, tras caer ante el argentino Julián Pinzas, en un combate marcado por una decisión controversial de los árbitros.
“Quiero sacarme esa espinita”, agrega. “Ese esa mala decisión de ese arbitro (no recuerda su nombre) en Toronto me quitó el oro, por lo que llegó el momento de quitarme esa espinita que llevo”, observa el karateca de menos de 67 kilogramos.
“Será mi última participación de unos Juegos Panamericanos (los de Perú). De ahí con la meta de traer el oro, buscaré puntos para los Juegos Olímpicos de Tokio, para entonces irme por la puerta grande y decir adiós al karate”, acotó el ingeniero industrial.
Ferreras, quien es parte del programa Creso asegura que analiza día tras día a sus contrincantes (7) que irán a los Juegos con ese peso.
Añade que “vamos analizando en base a su formato de combate. Hacemos modelos de combate, como ellos pelean. Veo sus peleas vía vídeos”, cuenta.
Señala que el trabajo ha sido arduo, con dos sesiones diarias en el tatami de karate en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte “junto a mis entrenadores Antonio Vólquez, Tony Mesa y Carlos Valdez”, declara el atleta de la Armada de la República, órgano al cual ingresó en el 2006.
Lo que quiere, un apartamento
Ferreras tiene grandes expectativas porque es un veterano ya en Juegos Panamericanos y Centroamericanos y del Caribe, por lo que espera que si trae la medalla de oro desde Perú, tiene un deseo: conseguir un apartamento.
“Nunca he pedido nada. Me han ofrecido un apartamento de acuerdo a las medallas que he tenido, sin embargo, creo que es momento de que si traigo la medalla me cumplan”, sostiene en voz pasiva y con una sonrisa en su cara.
Ferreras ha sido campeón Centroamericanos y del Caribe dos veces en Karate. En el 2015 ganó plata en Toronto, en 65 kilogramos.
Tiene claro que debe dar el paso de atleta a ingeniero
Ferreras, vive con su esposa e hija de año y medio tiene claro que el tiempo del deporte culmina y que debe dar el paso.
“Ya soy ingeniero gracias al deporte. Ahora estoy haciendo una maestría de en gestión de riesgo y calidad, gracias al Creso y al Ministerio de la Juventud, que me dio una beca”, expresa.
Dice que vive del deporte, que le debe todo al karate, pero que llegará un momento en el cual tendrá que ejercer como ingeniero.
“No puedo ejercer porque el deporte me quita mucho tiempo”, responde sobre el por qué no ejerce como ingeniero. “Imagínate yo vivo viajando, que empresa me va a aceptar con el poco tiempo que tengo”, sostuvo. “Cuando todo esto pase (Juegos Panamericanos y Olímpicos), quiero dedicarme en lleno a mi carrera. El deportes es bonito, pero no se puede vivir solamente con del deporte.
WILLIAM AISH / EDITOR DEPORTIVO EL NUEVO DIARIO
Vía: El Nuevo Diario
