Tuto Tavarez
SANTIAGO. – Las cenizas del expelotero profesional Nelson Pichardo, serán traídas el fin de semana al municipio de Tamboril, su lugar de nacimiento y de donde salió para el béisbol de los Estados Unidos.
Pichardo murió de un derrame cerebral en la ciudad de Nueva York, donde se estableció con su familia cuando se retiró como jugador activo.
El ingeniero Víctor Polanco informó que el sábado a las 10:00 de la mañana, será oficiada una misa en la iglesia San Rafael, de Tamboril donde estarán presentes las cenizas de Nelson Pichardo.
Luego serán llevadas al cementerio municipal donde serán colocadas en una bóveda.
Polanco describió a Pichardo como un hombre muy querido en el municipio de Tamboril y recordó que cuando viajaba, siempre regresaba con bates, guantes y pelotas para los jóvenes que practican béisbol.
HISTORIA EN EL JULIAN JAVIER
Nelson Pichardo inscribió su nombre en los libros de historias de la pelota dominicana.
El 26 de diciembre de 1976, Pichardo disparó el primer triple que se conectó en el estadio Julián Javier, de San Francisco de Macorís.
El batazo de Pichardo en el hoy hogar de los Gigantes del Cibao, fue contra el zurdo Ramón De los Santos (Pintacora).
En la pelota dominicana Pichardo jugó con los Tigres del Licey desde 1970 hasta 1978, militando un año con los Leones del Escogido.
Fue firmado para el béisbol profesional en 1969 por la organización de los Mets de Nueva York, llegando a jugar a nivel de triple A.
Pichardo tenía habilidad para jugar en los jardines y el cuadro interior, ya que era dueño de una gran velocidad.
Incursionó al final de su carrera en la Liga de Verano del Cibal, donde militó para los Piratas del Atlántico de Puerto Plata.
El carismático jugador tamborileño Nelson Pichardo estaba casado con la señora María Teresa Rodríguez, con quien procreó a Sandy, Nelson y Yessenia.
