Los Gigantes del Cibao y su equipo de operaciones ejecutaron una jugada arriesgada que, en la inmediatez del Todos contra Todos, ya comienza a pasar factura. Un Draft de Reingreso en el que se apostó al bateo y se ignoró la necesidad de lanzadores abridores terminó por exponer la falla más recurrente del conjunto, no solo en la presente temporada, sino a lo largo de los últimos años.
La historia reciente no engaña. Los Gigantes han tenido serios problemas con los brazos iniciadores, y los resultados han sido inmediatos y contundentes: en apenas tres entradas de trabajo de sus abridores en el arranque del Round Robin han permitido nueve anotaciones, obligando a un relevo ya castigado por la fase regular a cargar con un sobreesfuerzo temprano.
Es cierto que el Todos contra Todos apenas comienza, pero en béisbol existe una verdad que suele cumplirse como dogma: el juego se contagia. El 0-2 inicial no solo pesa en el standing, también revive recuerdos recientes de presentaciones fallidas de los Potros en esta misma etapa.
Los Gigantes del Cibao y el pitcheo abridor
Desde el 12 de noviembre, ningún abridor de los Gigantes ha logrado una victoria en la temporada 2025-26. El equipo cerró la fase regular con un récord de 1-17 para su rotación, el peor registro para un staff abridor en una temporada de 72 años de historia de LIDOM.
Fuera de Wily Peralta, un brazo con experiencia de Grandes Ligas, no existe actualmente un abridor nativo sólido en el staff nordestano, y es preciso subrayar que Peralta no se encuentra activo con el equipo en este momento.
La pregunta surge de inmediato: ¿no hacían falta abridores? nombres como Radhamés Liz, Esmil Rogers y César Valdez estuvieron disponibles en el Draft de Reingreso. Dos de ellos ni siquiera fueron seleccionados, mientras Liz y Enny Romero pasaron ronda tras ronda sin ser tomados. La decisión de los Gigantes fue clara: apostar en dirección contraria a su realidad histórica.
Los antecedentes refuerzan el argumento. En el Todos contra Todos 2023-24, último disputado por los nordestanos, su pitcheo abridor terminó con marca de 1-4 y efectividad de 4.26, el peor registro de esa etapa, y el equipo cerró 7-11, fuera de la final.
En la fase regular 2023-24, los abridores registraron 6-10 con 4.16 de efectividad; en 2024-25, 12-15 con 4.47; y en la actual campaña, el ya citado 1-17 con 4.63.
No es un problema aislado ni atribuible únicamente al estadio: el pitcheo abridor de los Gigantes es una grieta estructural.
Paradójicamente, su mejor registro reciente llegó en 2022-23, con 3.49 de efectividad, justo en el año de la peor ofensiva colectiva en la historia de LIDOM, cuando la liga bateó .223. Una ironía que el béisbol suele regalar sin pedir permiso.
Buenos bates, sin pitcheo abridor
La ofensiva nunca ha sido el problema. Los Gigantes han construido históricamente alineaciones temibles.
Si vamos a la historia, desfilaron nombres de peso como Kendry Morales, Nelson Cruz, y en otras etapas Marcell Ozuna, Bryan Peña, Brad Nelson, Julio Ramírez, Moisés Sierra, Hanser Alberto y Ángel Peña, entre otros.
Hoy, la tentación vuelve a ser la misma. Juntar a Ismael Munguía, Francisco Mejía, Johan Rojas, Luis García Jr. y Nicholas Torres es una apuesta ofensiva atractiva, capaz de seducir al fanático y de ganar juegos aislados.
Pero la historia ha sido insistente: sin pitcheo abridor que marque el ritmo, los bates terminan bateando contra el reloj.
En el béisbol de octubre, noviembre y diciembre, no basta con anotar; hay que evitar que el juego se rompa temprano. Y cuando la rotación no puede sostener el pulso inicial, el bullpen se desangra, la ofensiva se presiona y el margen de error desaparece.
Los Gigantes del Cibao y una apuesta que falla
Los Gigantes del Cibao apostaron al bateo en el Draft de Reingreso, pero dejaron vacíos evidentes en la rotación abridora. El inicio del Todos contra Todos no hizo más que confirmar una tendencia conocida: los campeonatos no se construyen solo con maderos, sino con brazos capaces de sostener la batalla desde el primer lanzamiento.
Puedes Leer: Las Águilas dicen presente: Vencen Gigantes 10-6 en el Establo
